Los conductores y propietarios de vehículos se hacen siempre la misma pregunta: qué será mejor para mi coche, el diésel o la gasolina. Hasta hace relativamente poco tiempo, los coches que se decantaban por el diésel eran muchos más que los que lo hacían por la gasolina.

Sin embargo, hace unos meses que esta tendencia está cambiando y empieza a revertirse. Por eso, el diésel actualmente apenas representa en torno a un 37% de las ventas de vehículos en el país, mientras que la gasolina va ya por el 57,2%. El resto del porcentaje se ha reservado a los híbridos y a los coches eléctricos.

Para los coches que van a recorrer muchos kilómetros al año tienen como recomendación el coche diésel como mejor opción, ya que el precio es más bajo que el de la gasolina.

Además, en la ciudad los turismos tienen como buena alternativa la gasolina. Sobre todo, a la hora de circular a menor velocidad como se indica en las ciudades y zonas urbanas.

La elección no es solo una cuestión económica, también es importante para la contaminación. El diésel contamina bastante menos la emisión de dióxido de carbono a la atmósfera y tienen unos mecanismos que reducen muchísimo el consumo de combustible y, por tanto, de las emisiones. La gasolina, por su parte, es mucho más contaminante.