Hay vehículos que han marcado un hito en la historia de la automoción y con las furgonetas ha pasado exactamente igual. Por ello, en este post queremos hablar de una de ellas que, por diferentes circunstancias, por mucho que pase el tiempo, permanece en nuestra memoria.

Efectivamente, hablamos de la mítica Volkswagen Caravelle. Con más de sesenta años de historia, se ha hecho popular por convertirse en un icono de la época ‘hippie’ de los 60, casi siempre pintada con motivos florales o de marihuana.

Y es que nadie imaginó que triunfaría un vehículo que estaba hecho de retales del Beetle. El momento clave fue una visita de Ben Pon, un importador holandés de Volkswagen, a la fábrica de Wolfsburg. Se percató de que los trabajadores utilizaban un vehículo para transportar cargas construido con piezas del escarabajo.

Los primeros prototipos no fueron precisamente acertados, pero cuando dieron en la diana, la Caravelle tuvo tanto éxito que se fabricaron para policía, bomberos, carteros, etc. Incluso aparecieron versiones que podían circular sobre los raíles del ferrocarril, con cocina de gasolina o con comodidades como sofá, cama y mesa plegable.

La Caravelle aún se comercializa en Brasil. En Europa, el modelo que la sustituyó fue la Multivan.

Fuente: Ocio.net