Son días de inestabilidad meteorológica por todo el país y no sería extraño que iniciases un trayecto en coche con un sol espléndido y a los pocos kilómetros comience a llover copiosamente. ¿Qué se debe hacer? Desde luego, no es lo mismo conducir con buen tiempo que con agua.

Pero tranquilo, no hay nada que temer, tan sólo seguir las siguientes recomendaciones:

• No hagas movimientos bruscos con el volante y evita frenadas fuertes para que tus ruedas no patinen y provoques el temido aquaplaning.
• Aminora la marcha y aumenta la distancia de seguridad. El ‘efecto spray’ que provocan los coches que te preceden hará que veas peor y eso influirá en el tiempo de reacción ante un imprevisto.
• No te olvides de encender las luces de posición y de cruce para que te vea el resto de conductores. Incluso, si la lluvia es muy intensa, utiliza también las antiniebla traseras.
• A pesar de que la pintura blanca de pasos de cebra y arcenes tiene un tratamiento antideslizante, está claro que agarra menos que el asfalto. Por ello, evita pasar por encima y mucho menos frenar.

Fuente: Autopista.