Estar pendiente del vehículo que conducimos puede ahorrarnos muchos disgustos y gastos innecesarios. Cuando necesitamos llevarlo al taller suele ser un suplicio ya que si no sabemos qué le pasa, debemos llevarlo a un taller de calidad y confianza y sobre todo, un sitio donde no nos cobren un precio desorbitado por el diagnóstico y la reparación.

Te aconsejamos un taller que te ofrezca facilidades de pago y te dé servicios como el de recogida y entrega de tu vehículo.

Pero llevarlo al taller no basta para que tu vehículo dure muchos años en un estado decente. El modo en que conduces, las veces que lo limpies al año, si duerme a la intemperie o no, si está sometido a muchos cambios climáticos, etc. son factores muy importantes que pueden determinar su duración.

Consejos para alguien que conduce:

-Protege la pintura tanto en invierno como en verano.

-Cuida el interior del motor con cera o grasas protectoras.

-Ten cuidado con los golpes a los bordillos.

-No alargues la fecha de la inspección ya que te puede costar caro.

-Antes de iniciar la marcha espera a que el motor se caliente un poco.

-Lavar bien el coche:

*Presta la misma atención al interior que al exterior.

*Es muy importante pasar bien la aspiradora a las alfombrillas, los conductos de ventilación, asientos, etc.

*Para limpiar las llantas te recomendamos que utilices productos especiales y que lo hagas a mano.

*La carrocería con una esponja, agua y jabón.

 

Por otro lado, debes tener cuidado con el frío. Puede ser muy perjudicial para los coches.